En la bulliciosa ciudad de Miami, hay una historia que se remonta a La Habana en la década de 1920. Aquí es donde una joven socialité cubana, Elena Ruz Valdés-Fauli, dejó su huella en el mundo de la gastronomía. Cuando Elena estaba en sus primeros 20 años, solía frecuentar el restaurante El Carmelo en La Habana después de una noche de teatro o cine con amigos. Su pedido habitual era una creación única: un sándwich de pavo en pan medianoche, con queso crema y mermelada de fresa.

El sándwich Elena Ruz se hizo tan popular que Elena pidió al gerente del restaurante que lo incluyera en el menú. Fue entonces cuando su nombre brilló en luces de neón, y su creación estaba disponible por tan solo 25 centavos. Esta deliciosa combinación de sabores dulces y salados se ha convertido en un icono cubano que ha perdurado a lo largo de los años, incluso después de que los cubanos abandonaran la isla tras la revolución.

Foto: versaillesrestaurant

Hoy en día, restaurantes clásicos cubanos en Miami como Versailles, La Carreta o Pinecrest Bakery siguen ofreciendo el Elena Ruz en sus menús. Aunque los jóvenes cubanos están olvidando poco a poco este sándwich y su historia, los restauradores se niegan a retirarlo de sus ofertas. El sándwich Elena Ruz es un recordatorio de una época pasada y un homenaje al ingenio de Elena Ruz Valdés-Fauli, una mujer que, sin saberlo, creó un clásico culinario que perdura en el tiempo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *